¿Qué es el virus del Nilo?

El virus del Nilo Occidental es una enfermedad infecciosa transmitida por la picadura de mosquitos y en la mayoría de los casos se presenta de manera asintomática y el resto con carácter leve, similar a un proceso gripal. Aunque en algunos casos cuando entra en el cerebro puede llegar a ser mortal.
Cómo se transmite el virus del Nilo
Se considera que los principales vectores son los mosquitos del género Culex, en particular Culex pipiens, la transmisión del virus del nilo al ser humano es a través de las picaduras de mosquitos que se infestan cuando pican a aves infestadas, que son los reservorios del virus, este pasa a las glándulas salivales del mosquito y cuando pica puede inyectar el virus al ser humano y animales.
Para que un mosquito pueda infectar ha de transformar su larva en un mosquito adulto. La hembra necesita sangre cuando llega el momento de la puesta y en el proceso de picadura es cuando inocula el agente infeccioso. La puesta y el desarrollo de las larvas se hacen en agua (generalmente estancada).
Síntomas del virus del Nilo
La infección por el virus del Nilo Occidental es asintomática en aproximadamente un 80% de las personas infectadas; en las demás puede causar una afección grave.
Aproximadamente un 20% de las personas infectadas por este agente patógeno presentan síntomas del virus del Nilo, que se caracteriza por fiebre, dolores de cabeza, cansancio, dolores corporales, náuseas, vómitos y, a veces, erupción cutánea (del tronco) y agrandamiento de ganglios linfáticos.
Los síntomas de afección grave (también llamada enfermedad neuroinvasora, como la encefalitis o meningitis del Nilo Occidental o poliomielitis del Nilo Occidental) son dolores de cabeza, fiebre elevada, rigidez de nuca, estupor, desorientación, coma, temblores, convulsiones, debilidad muscular y parálisis.
El periodo de incubación suele durar entre 3 y 14 días.
¿Existe tratamiento para el virus?
El tratamiento de los pacientes con afección neuroinvasora consiste en medidas de sostén, tales como administración de líquidos por vía intravenosa, apoyo respiratorio y prevención de infecciones secundarias. No hay vacuna para los seres humanos ni tratamientos antivirales específicos, se pueden usar analgésicos para reducir la fiebre y aliviar algunos síntomas.
Cómo prevenimos la expansión del virus
Como no hay vacuna, la mejor manera de reducir la infección en los seres humanos es mediante la concienciación acerca de los factores de riesgo y la adopción de medidas preventivas que pueden adoptarse para reducir la exposición al virus, tales como:
- El uso de mosquiteros, repelente de insectos, uso de ropas de color claro (camisa de manga larga y pantalón)
- Evitar las actividades al aire libre en horas en que los mosquitos pican más.
- Evitar zonas con agua estancada
- Seguir las instrucciones de los programas de control de mosquitos establecidos por los Ayuntamientos